miércoles, 21 de noviembre de 2007

El Autoanálisis

Decía Séneca que "si no sabes hacia qué puerto navegas, ningún viento es bueno". Merece la pena dedicar algún tiempo de nuestra vida a reconocernos como primer paso para definir nuestros objetivos en la vida.

Los resultados que se obtienen tras la realización de este análisis permiten dar respuestas simples a las siguiente preguntas:
  • ¿Qué es lo que no quiero en mi vida?.
  • ¿Qué quiero realmente de mi y de mi vida?.
  • ¿Qué sé hacer bien yo, cuáles son mis habilidades o talentos diferenciales y singulares?.
  • ¿Vivo feliz, conforme o resignado?.
  • En caso de que la respuesta al punto anterior se mueva entre la conformidad y la resignación: ¿Qué puedo hacer para ser feliz?.

El autoanálisis no es más que una herramienta para los insatisfechos inteligentes, aquellos que se sienten desaprovechados, que creen que hay una parte importantísisma de sí mismos que está pidiendo a gritos una oportunidad para redefinir su vida, para hacerla más próspera, con una dirección y, sobre todo, con sentido.

Este proceso de análisis hay que hacerlo en positivo, ya que, todo está ahí, en positivo, dentro de nosotros.